Se calcula que en los últimos 10 años han salido de Venezuela mas de un millón de venezolanos, y con ellos han llevado por todo el mundo sus costumbres, su forma particular de ver la vida, su ideosincracia, y hasta su manera de hablar, que a tantas personas les agrada. Por eso hoy, y aprovechando la reunión de nuestra familia venezolana en Costa Rica, tierra de nuestra madre, hemos querido compartir en este espacio Feliz y Saludable , una de las costumbres venezolanas mas queridas, la confección de hallacas, que es una comida de la temporada navideña.
La hallaca es un plato típico venezolano, formado por un bollo o tamal hecho con masa de maíz saborizada con caldo de gallina y coloreada con onoto, que se rellena con un guiso de carne de res, gallina y cerdo, al cual se le agregan después, aceitunas, uvas pasas, pimientos y cebolla, envolviéndose de forma rectangular en hojas de plátano, para finalmente ser atada con pabilo o pita y hervida en agua.
Varios días antes de navidad, la familia se reúne en una especie de rito anual, para preparar las hallacas; todos colaboran, desde los niños que limpian las hojas de plátano, las madres o abuelas que preparan el guiso, hasta las jóvenes que arman los pasteles. Como en todo buen evento, la confección de hallacas en nuestra familia se divide en tres etapas, preparación, confección, y degustación.
En la preparación se selecciona cuidadosamente la fecha, el criterio mas importante es que la familia este disponible para reunirse en pleno ese día. Dos días antes se compran los ingredientes, se limpian las hojas, y se pone todo a punto para preparar el guiso, el cual se cocina el día antes.
Como todo trabajo de equipo el día del ensamblaje, nuestra sobrina y hermanas, de común acuerdo con nuestra madre han repartido los diferentes roles de cada miembro de nuestra familia, y se preparan los ID o carnets de cada participante. No es común que los varones ayuden, pero siempre apoyan en alguna actividad junto a un refresco, ponche-crema o cerveza, sobre todo amarrando los paquetes ya armados con hilo pabilo.
Este año se creo un nuevo rol, el de periodista, y no necesito contarles quien fue el premiado! Aprovechando el auge de las redes sociales, este año pudimos compartir con la familia en Venezuela y otras latitudes, los videos en Facebook del proceso de ensamblaje, repartición de premios sorpresas, y algunas de las fotos.
Cuando están todas las hallacas armadas, se introducen en ollas con agua hirviendo para terminar de cocinarlas. Una vez terminadas se acostumbra servir varias para probarlas en familia, o ponerlas en el congelador para ir consumiéndolas durante las reuniones y celebraciones que se van produciendo en el último mes del año y primeros días del siguiente y sobre todo como plato principal en las cenas de Nochebuena y Año Nuevo acompañadas de pan de jamón, pernil de cochino, ensalada de gallina, ponche, vino, torta negra, dulce de lechosa (papaya) y una infinita variedad de exquisiteces.
Junto con el nacimiento el arbolito y aguinaldos y parrandas, parte del tradicional repertorio musical de las fiestas navideñas de Venezuela, la hallaca, esta maravillosa tradición culinaria, sigue viva en las familias venezolanas y cada diciembre le renueva el gusto por la cocina tradicional.
Hoy IV Domingo de Adviento, después de disfrutar un riquísimo "Gallo Pinto", o desayuno costarricense, y de ir a visitar a mi madrina y abuelita de 101 años de edad, miembros de la familia Vilagut-Vega, nos uniremos al grupo de venezolanos en Costa Rica que ha organizado una Misa en la Iglesia Don Bosco Zapote a las 11:00hrs, te invitamos a unirte. Si gustas nos podés compartir como celebran las navidades en tu país y en tu familia, tal como lo hemos hecho nosotros. Que tengan un Feliz y Saludable 20 de diciembre de 2009.
El Arbolito de nuestro hogar diseñado por Juan Carlos Vilagut Vega
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