La empresa más rentable del planeta no es tecnológica… es Aramco: ¿debería estar en tu portafolio de inversiones inteligentes?

Durante años hemos vivido enamorados del brillo tecnológico: Apple, Microsoft, Nvidia, Meta, Amazon… todos compiten por ser los titanes del mercado global. Sin embargo, lejos de Silicon Valley, en medio del desierto saudí, hay un gigante silencioso que sigue marcando récords de rentabilidad: Saudi Aramco, la petrolera estatal de Arabia Saudita y, hoy por hoy, la empresa más rentable del mundo.

Sí, en pleno 2025, mientras la economía global avanza hacia la digitalización, es una compañía de petróleo y gas la que mantiene la corona. Esto abre una pregunta poderosa para ti, inversor consciente y lector fiel de Feliz y Saludable:
¿Debe una empresa petrolera —aunque sea la más rentable del mundo— formar parte de un portafolio de inversión moderno, diversificado y amigable con el medio ambiente?

Vamos por partes.

---

Aramco: el gigante que supera incluso a las Magníficas Tecnológicas

A pesar de que sus ganancias varían según el precio del crudo, Aramco sigue generando utilidades que ninguna empresa tecnológica ha podido igualar de forma consistente. Tiene la capacidad de producir petróleo a uno de los costos más bajos del planeta, controla reservas enormes y opera con un músculo financiero que pocas corporaciones pueden imitar.

Pero Aramco no solo es rentabilidad pura: también es poder geopolítico. Sus resultados mueven mercados, definen estrategias energéticas y muchas veces determinan el rumbo del petróleo a nivel mundial.

---

¿Y lo ambiental? ¿Puede un inversor responsable mirar a Aramco sin culpa?

Aquí empieza lo interesante.

Aunque Aramco es y seguirá siendo una empresa petrolera, ha comenzado una transición (lenta, sí, pero real):

1. Compromiso a cero emisiones operativas para 2050

Está reduciendo sus emisiones directas (Scope 1 y 2) y bajó el metano en más de un 11% en 2024.

2. Inversión en proyectos de energía limpia

Aramco ya participa en solar, eólica, geotermia y planea instalar hasta 12 GW en renovables para 2030. Eso es enorme incluso para estándares latinoamericanos.

3. Hidrógeno de bajo carbono

Desde la producción industrial en Jazan hasta estaciones de recarga y flotillas de vehículos de prueba. Arabia Saudita quiere convertirse en un líder mundial del hidrógeno… y Aramco está al centro.

4. Captura de carbono (la apuesta fuerte)

Captura y almacena CO₂, trabaja en economía circular del carbono e incluso opera plantas piloto de captura directa del aire. Mucho de esto sigue en fase experimental, pero indica una dirección clara.

5. Polímeros y reciclaje avanzado

Junto con SABIC, buscan convertir el CO₂ y los residuos plásticos en nuevos materiales.

¿Esto significa que Aramco es “verde”?
No.
¿Significa que está haciendo más que muchas empresas globales?
Sí. Y mucho más que la mayoría de petroleras de América Latina.

---

¿Entonces… debería estar en un portafolio moderno?

Aquí entran tres verdades simples y poderosas:

1. La energía seguirá siendo esencial

Incluso con más renovables, el mundo depende —y dependerá— del petróleo y gas durante varias décadas. Exponer una parte razonable del portafolio al sector energía puede ser estratégico.

2. Aramco no es solo petróleo

Su brazo de “New Energies” y sus inversiones en hidrógeno, renovables y captura de carbono la convierten en un híbrido interesante para quienes buscan oportunidades en la transición energética.

3. No es apta para todos

Hay riesgos regulatorios, reputacionales y de transición. Además, invertir directo en la bolsa saudí no es tan fácil para latinoamericanos. La vía más práctica suele ser a través de ETFs con exposición a Arabia Saudita.

---

La reflexión final 

Si te interesa construir riqueza, diversificar con inteligencia y entender cómo funciona realmente el mundo financiero, debes mirar más allá de las modas tecnológicas.
El petróleo sigue mandando, y Aramco —para bien o para mal— es una pieza clave de la economía global.

¿Debe estar en tu portafolio?
Depende de tu estrategia, tu perfil de riesgo y tu postura ética frente a la energía.

Pero ignorarla por completo sería un error:
es la empresa más rentable del mundo y está metida de lleno en la transición energética, desde el hidrógeno hasta la captura de carbono.

Y como siempre decimos en este espacio:

Las decisiones informadas te hacen financieramente feliz, y las decisiones impulsivas… no tanto.