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jueves, 22 de agosto de 2024

Venezuela y Nicaragua: La Agonía de la Democracia, los Intereses Globales y las Diferentes Perspectivas Futuras.

 


Venezuela y Nicaragua: La Agonía de la Democracia, los Intereses Globales y las Diferentes Perspectivas Futuras.  San José de Costa Rica, 22 de agosto de 2024, rafaelvilagut@gmail.com.

Este artículo presenta un análisis completo y detallado de la situación en Venezuela y Nicaragua, integrando los aspectos políticos, económicos y sociales, y destacando las diferencias en las perspectivas futuras para ambos países.


Introducción.

Habiendo vivido en Venezuela durante 40 años y viajado frecuentemente a Nicaragua, he sido testigo del constante deterioro de la democracia, la paz y la prosperidad en estos países. En este episodio de Feliz y Saludable, exploramos las posibles causas de estas crisis, incluyendo la influencia de potencias extranjeras como China, Rusia, Irán y Cuba, así como el papel de Estados Unidos, la Unión Europea y los organismos internacionales. También analizamos las devastadoras consecuencias que han afectado la calidad de vida, la educación, la infraestructura, y han provocado un aumento alarmante en la pobreza extrema y la migración hacia otros países. Además, destacaremos un matiz importante que podría marcar una diferencia significativa en el futuro de ambos países.

Contexto Histórico y Político.

Para entender el colapso actual en Venezuela y Nicaragua, es crucial analizar la historia reciente de ambos países. Tanto Venezuela bajo Hugo Chávez y Nicolás Maduro, como Nicaragua bajo Daniel Ortega, han seguido caminos que, aunque inicialmente prometían bienestar social, rápidamente se convirtieron en regímenes autoritarios.

  • Venezuela: Chávez llegó al poder en 1.999 con una promesa de revolución bolivariana. Sin embargo, la concentración de poder, la expropiación de empresas y la dependencia del petróleo llevaron al país a una crisis económica y social sin precedentes.
  • Nicaragua: Ortega, líder del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), retomó el poder en 2.007. Desde entonces, su gobierno ha sido marcado por la represión, la corrupción y la erosión de las instituciones democráticas.

Influencia de Potencias Extranjeras.

El rol de potencias extranjeras en estos procesos ha sido fundamental. China, Rusia, Irán y Cuba han establecido relaciones estratégicas con Venezuela y Nicaragua, aportando apoyo económico, militar y diplomático a cambio de influencia geopolítica.

  • China: Ha invertido significativamente en proyectos de infraestructura y petróleo en Venezuela y ha fortalecido sus lazos con Nicaragua, especialmente a través de proyectos como el Canal Interoceánico, últimamente con los buses de transporte público.
  • Rusia: Ha proporcionado apoyo militar a ambos regímenes, además de involucrarse en acuerdos energéticos y de armas.
  • Irán: Ha encontrado en Venezuela un aliado en su lucha contra las sanciones occidentales, estableciendo acuerdos bilaterales que incluyen intercambio de petróleo y tecnología.
  • Cuba: Históricamente, ha desempeñado un rol clave en el entrenamiento y asesoramiento de las fuerzas de seguridad en ambos países, fomentando un modelo de represión y control social.

El Papel de Estados Unidos, la Unión Europea y Organismos Internacionales.

Frente a la influencia de China, Rusia, Irán y Cuba, Estados Unidos, la Unión Europea y varios organismos internacionales han desempeñado un papel crucial, aunque a menudo controvertido, en la respuesta a las crisis en Venezuela y Nicaragua.

  • Estados Unidos: Ha liderado los esfuerzos internacionales para sancionar a los regímenes de Maduro y Ortega, implementando una serie de sanciones económicas y diplomáticas. Sin embargo, estas medidas han sido criticadas por algunos sectores, quienes argumentan que han agravado las condiciones de vida para la población en general, sin lograr un cambio significativo en el liderazgo político.

  • Unión Europea: Ha adoptado un enfoque más diplomático, combinando sanciones con esfuerzos para mediar en negociaciones políticas. La UE ha apoyado el diálogo entre el gobierno y la oposición en ambos países, aunque con resultados limitados hasta la fecha.

  • Organismos Internacionales: Entidades como la Organización de Estados Americanos (OEA), la ONU y la Corte Penal Internacional (CPI) han denunciado las violaciones de derechos humanos y la erosión democrática en Venezuela y Nicaragua. No obstante, las acciones concretas han sido insuficientes para revertir las crisis, en gran parte debido a la falta de consenso global y a la resistencia de los gobiernos implicados.

Consecuencias Sociales y Económicas.

El impacto de estas políticas y alianzas ha sido devastador para la población.

  • Deterioro de la Calidad de Vida: La escasez de alimentos, medicinas y productos básicos ha alcanzado niveles críticos, especialmente en Venezuela, donde la hiperinflación ha erosionado el poder adquisitivo.
  • Colapso de la Educación y la Infraestructura: Las escuelas y universidades en ambos países están en ruinas, con escasos recursos y una fuga de cerebros alarmante. Las infraestructuras básicas, como carreteras y hospitales, están en estado deplorable.
  • Aumento de la Pobreza Extrema: La pobreza extrema ha escalado, alcanzando a más del 70% de la población en Venezuela y cifras similares en las zonas rurales de Nicaragua.
  • Migración Masiva: La crisis ha llevado a millones de venezolanos y nicaragüenses a huir de sus países en busca de un futuro mejor, creando una crisis migratoria sin precedentes en la región.

Un Matiz Importante: Diferentes Caminos hacia el Futuro.

Antes de llegar a las conclusiones, es fundamental destacar un matiz que podría marcar una diferencia significativa entre Venezuela y Nicaragua en un futuro cercano. En Venezuela, ha surgido un liderazgo renovado y con gran potencial de cambio a través de figuras como María Corina Machado y el presidente electo Edmundo González Urrutia. Este liderazgo ha revitalizado la esperanza entre los venezolanos, ofreciendo una visión clara y decidida para la reconstrucción del país y la restauración de la democracia.

Por otro lado, en Nicaragua, la situación es más sombría. A pesar de la resistencia y el deseo de cambio en amplios sectores de la población, hasta el momento, no ha surgido un liderazgo opositor con la fuerza y legitimidad necesarias para desafiar efectivamente al régimen de Daniel Ortega. Esto sugiere que, mientras en Venezuela hay motivos para un optimismo cauteloso, en Nicaragua es probable que el régimen se endurezca aún más, profundizando la represión y el deterioro de las condiciones de vida.

Conclusión.

El análisis de los casos de Venezuela y Nicaragua revela cómo la intervención extranjera y la consolidación de regímenes autoritarios han acelerado el deterioro de estos países. Sin embargo, mientras Venezuela podría estar en el umbral de un cambio positivo bajo un nuevo liderazgo, Nicaragua enfrenta un futuro más incierto y probablemente más oscuro. La falta de acción efectiva por parte de organismos regionales e internacionales agrava la situación en ambos países, dejando a las poblaciones atrapadas en un ciclo de pobreza y represión.

En Feliz y Saludable, creemos que es crucial seguir investigando y denunciando estas situaciones, mientras se promueve la solidaridad internacional y se busca soluciones a largo plazo para restaurar la democracia y mejorar la calidad de vida en estos países.

Fuentes Consultadas.

  1. Banco Mundial: Datos sobre pobreza, desarrollo e impacto económico en Venezuela y Nicaragua.
  2. Organización de Estados Americanos (OEA): Informes sobre la situación de derechos humanos y la democracia en ambos países.
  3. Amnistía Internacional y Human Rights Watch: Documentación sobre las violaciones de derechos humanos y la represión en Venezuela y Nicaragua.
  4. ONU: Reportes sobre la crisis humanitaria y migratoria en Venezuela y Nicaragua.
  5. Prensa Internacional (BBC, The New York Times, El País, DW): Cobertura de la situación política y económica en Venezuela y Nicaragua desde el 2000.
  6. Artículos académicos: Estudios sobre la influencia de potencias extranjeras y la respuesta internacional en América Latina.

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